![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjks5d165kSqLZlMCtF8KbSVEW2Z_66myKknZ0Ax7zhuQReNtK2n_pNyuCoHSmeUjTiDGKYQOAdmFCcVskQYDUd-JdB2cIJiSa6epu2nA0Z9_iIYBhtNyUkFoC_oHjgLlUV7kxdrheE91M/s320/sleeping-body-helena-wierzbicki.jpg)
SOY MI CUERPO. Y mi cuerpo está triste, está cansado. Me dispongo a dormir una semana, un mes; no me hablen.
Que cuando abra los ojos hayan crecido los niños y todas las cosas sonrían.
Quiero edjar de pisar con los pies desnudos el frío. Echenme encima todo lo que tenga calor, las sábanas, las mantas, algunos papeles y recuerdos, y cierren todas las puertas para que no se vaya mi soledad.
Quiero dormir un mes, un año, dormirme. Y si hablo dormido no me hagan caso, si digo algún nombre, si me quejo. Quiero que hagan de cuenta que estoy enterrado, y que ustedes no pueden hacer nada hasta el día de la resurrección.
Ahora quiero dormir un año, nada más dormir.
Jaime Sabines